Expande tu luz

12 Dic

 

Otro año más llega la Navidad, una fecha odiada por muchos y venerada por otros.

Al margen de la religión o de las creencias que cada uno profese, es un tiempo de magia.

Es un tiempo de renacimiento de la luz, de expandir el corazón.

Yo lo siento así en cada célula de mi cuerpo.

Es tiempo de honrar y recordar a los que ya partieron, de recordar con una sonrisa en los labios todos los momentos que compartimos con ellos, porque por dura que haya sido la despedida, su amor y  su calor permanecerá por siempre en nuestros corazones.

El amor no pasa nunca, hay una parte de él que es inmortal.

Igualmente pasa con las personas que una vez formaron parte de nuestra vida, pero en algún momento, decidieron continuar su viaje en esta tierra sin que formemos parte ya de su andadura.

Aunque una parte de nosotros se haya resistido a dejarles marchar, al volver la vista atrás si somos capaces de conectarnos a la esencia de lo compartido podremos  contemplar la belleza de lo vivido y el amor de lo compartido.

Nada es eterno, nosotros mismos somos un ejemplo de que todo tiene tarde o temprano un final.

Por eso, te invito a expandir tu luz y tu amor a todos los que sí están presentes en tu dia a dia en estas fechas  y a conectar con la idea de que Navidad es todos los días, todas las horas, todo el tiempo.

Siempre es el momento perfecto para regalar amor, honrar y agradecer los infinitos regalos que nos ofrece la vida, aunque ninguno venga para quedarse.

Siempre es el momento perfecto para vivir en plenitud, en presente perfecto, en presencia perfecta, porque la vida es aquí y ahora.

Así que deja que ese espíritu de compartir y regalar amor te invada, sea cual sea tu situación.

El premio de abrir tu corazón y expandir tu luz es inmenso.

Comparte tu luz, expande tu luz, permiteté ver la luz en todo y en todos.

Somos luz y amor.

Te deseo una Navidad llena de luz.

Sandra