3 claves para acompañar a una persona en duelo

8 Ene

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A todos nos ha pasado, no saber qué  hacer cuando a alguien cercano se le va un ser querido.

Cómo en nuestra sociedad desafortunadamente la muerte sigue siendo un tabú, cómo desde pequeños no nos enseñan que la muerte es algo tan natural como la propia vida, pues cuando alguien a nuestro alrededor sufre una pérdida, muchas veces nos supone un reto, ese momento en el que nos quedamos a solas con él, tal vez en el tanatorio, tal vez cuando nos lo cruzamos por la calle….o cuando tenemos que llamarle para darle el pésame.

A continuación te cuento 3 claves que te serán útiles:

1-EL PODER DE LA PRESENCIA

No hace falta que hagas nada más especial que estar presente, la presencia no es sólo física, se puede estar presente por teléfono, a través de una carta, es esa actitud por la cual, te pones al servicio del otro, de sus necesidades, no de las tuyas.

En muchas ocasiones en los tanatorios o similares estamos más tensos y preocupados por una situación que nos desagrada y que querríamos evitar que de los verdaderos protagonistas que son los dolientes.

¿Cómo se está presente?

Poniéndose al servicio del otro, estando a su lado, de corazón, enfocado en el otro, en el detalle, que no te preocupen los silencios, no hay porqué hablar, basta a veces un buen abrazo, coger de la mano, una caricia, un beso y ACOMPAÑAR desde la QUIETUD, desde el SILENCIO, desde ese compartir simplemente un espacio común diciendo con tu presencia: AQUÍ ESTOY PARA TI.

2- LO QUE DEBEMOS EVITAR

Trata de evitar frases hechas, del tipo: “Sé cómo te sientes” Ïmagino por lo que estás pasando”

“Ahora tienes que ser fuerte” Cada persona es un mundo, no tenemos ni idea de lo que siente, de cómo va a gestionar lo sucedido, de cuál será su proceso….una vez más lo único verdaderamente útil que podemos hacer, es ponernos a su disposición, pero desde la proactividad, la persona que ha sufrido la pérdida no puede ser en un primer momento el dinamizador de la relación de ayuda, es decir, no le digas….”llámame si necesitas algo”

Va a necesitar muchas cosas, el tema es que no sabes si se va a permitir pedir ayuda, o de si se encontrará lo suficientemente fuerte como para hacer esa llamada.

Así que cámbialo, si de verdad quieres formar parte de su acompañamiento, por un: “Te llamo mañana” “Me paso a verte la semana que viene”, sin invadir su espacio y respetando sus deseos, pero mostrándote en disposición activa.

Si no quieres asumir ese rol, no pasa nada, a veces la muerte cercana nos revuelve nuestros propios procesos y tenemos que trabajar en nuestros temas antes de ponernos a ayudar o a acompañar a otros.

3-LO QUE DEBEMOS TENER EN CUENTA

La persona en duelo, entra en un proceso, cada uno dependiendo de sus experiencias, recursos, vivencias previas, lo va a vivir de una forma, no hay dos duelos iguales, porque no hay dos personas iguales, así que deja que cada uno viva su proceso de la manera que necesite, sin forzar tiempos ni obligar a nadie a sentir o a expresar cosas que no esté preparado, estar a su lado sin juzgar, sin imponer, es tu mejor regalo.

Es fundamental que le escuches con el corazón, te contará lo mismo una y mil veces pero necesita hacerlo, así que mantente a su disposición en esa escucha activa.

Dependiendo de tu cercanía con la persona y lo involucrado que estés con la situación tú también estarás elaborando un duelo, o puede que te sientas afectado por lo que vive la persona a la que estás acompañando, busca también recursos externos de ayuda…amigos, familiares, en los que apoyarte tú también.

Si tienes dudas sobre cómo actuar o te preocupa algo concreto a la hora de acompañar, busca un profesional que te asesore o comenta con personas que hayan pasado y superado experiencias similares tus dudas.

Gracias por tu valentía para acompañar a otro ser humano en este momento tan delicado de la vida que tarde  temprano pasaremos todos.

 

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